Como utilizar plantas para independizar tu jardín 3

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En esta tercera y última parte de esta serie de contenidos, en la que te contamos las plantas seleccionadas por nuestros jardineros profesionales de Madrid para separar zonas en jardines muy grandes, o generar intimidad y privacidad con tus vecinos de forma natural, seguimos con más plantas y arbustos floridos e interesantes para conseguir este efecto. Puedes ver el contenido anterior, haciendo click aquí…

Continuamos.

Madreselva.

Las madreselvas son trepadoras enroscadas con bonitas flores tubulares perfumadas, perfectas para cubrir muros, vallas y pérgolas. Pero lo que mucha gente no sabe, es que también hay tipos arbustivos de hoja perenne que constituyen un excelente arbusto de madreselva ideal para hacer un seto divisorio o perimetral en esos diseños que queremos conseguir con nuestros proyectos de jardinería.

El cultivo de la madreselva nos da una magnífica oportunidad de proteger un cobertizo de jardín poco bonito, o cubrir una nueva valla o enrejado y así crear la tan necesaria intimidad en el jardín.

Muchas madreselvas son semi perennes, lo que significa que pierden parte de sus hojas en invierno, pero conservan un efecto de pantalla parcial. Crecen entre dos y tres metros al año y florecen de verano a otoño.

Son plantas fáciles de cuidar, que prosperan en sombra ligera. Resiste bastante bien el frío pero no tolera bien los rayos directos del sol, por lo que es mejor colocarla donde solo le dé el sol de la mañana en verano.

Necesita regarla con cierta frecuencia, lo más recomendable será regar una vez por semana en invierno y dos o tres a lo sumo en verano, evitando que el suelo o la maceta se encharquen.

Se puede conseguir tanto a través de la plantación de las semillas como haciéndolo a través de esquejes aunque las semillas son siempre la opción de crecimiento más lento.

Recorta un tercio de los tallos floridos a finales del verano y vuelve a podarlos a finales del invierno para conseguir que rebrote y esté preciosa en la primavera.

Boj común.

El boj común forma parte de un grupo diverso de arbustos y árboles conocidos por su tendencia a crecer como plantas de hoja perenne que constituyen fantásticas vallas naturales. De bajo mantenimiento y relativamente fáciles de podar, como paisajistas profesionales nos encanta plantarlos con frecuencia en lugares que necesitan bordes perfilados. Para cultivarlos como componentes de un seto,  se puede plantar ejemplares jóvenes a unos treinta centímetros de distancia unos de otros.

Si quieres que crezcan de forma ordenada, asegúrate de situarlos a lo largo de una línea de seto previamente marcada. Las dimensiones de la zanja deben acomodar cómodamente cada planta, dando a las nuevas raíces espacio suficiente para extenderse uniformemente. Una vez colocados los arbustos, hay que añadir mantillo alrededor de la base. Esto ayudará a proteger las raíces del calor y del crecimiento de malas hierbas.

Con sus ramas compactas y sus hojas pequeñas y redondeadas, los arbustos de boj pueden bloquear completamente la luz y el calor. Dependiendo de la especie y el cultivar, pueden alcanzar entre 2 y 12 metros de altura. Por lo tanto, existe una planta de boj para prácticamente todo tipo de necesidades de protección del jardín. El boj inglés y el boj americano (ambos tipos de B. sempervirens) son algunas de las opciones más comunes para setos de jardín.

Requiere suelos no muy ácidos y que no se sequen demasiado en el verano.

Prefiere estar a semisombra, pero es capaz de aguantar el pleno sol si dispone de humedad suficiente.

El Boj no tiene problemas con el frío,  y soporta bastante adecuadamente las heladas.

Cuida la distancia de plantación en función de la altura final que desees dar al seto. Si nos interesa un seto alto, de más de 2 metros, plantaremos las plantas un poco más separadas que si necesitamos hacer un seto de 1 metro de alto. Aunque su crecimiento es lento, puede llegar a alcanzar 4-5 metros de altura por 2 de ancho.

Con estos pocos cuidados básicos, disfrutarás de una de las plantas para setos más utilizada desde hace siglos en jardines de toda Europa.

Lilas

Las lilas crecen como pequeños árboles y arbustos en flor en jardines y parques. Los más grandes pueden alcanzar los 10 metros de altura, pero hay algunos con una altura máxima más manejable, de sólo 2 metros. La mayoría de las especies se distinguen por sus hojas verdes brillantes en forma de corazón y su floración primaveral de color lila. Las llamativas flores surgen en grandes inflorescencias ramificadas.

Si deseas utilizar lilas para crear un seto florido, deberás proporcionar a cada planta un amplio espacio para que se extienda y crezca. Cada planta madura puede necesitar una superficie de al menos 2 x 3 metros, para que sus raíces y brotes se expandan al máximo de su potencial.

El lilo es una planta rústica y fuerte que soporta sin problemas las temperaturas más frías. A la hora de situarlo en el jardín deben elegirse zonas soleadas para conseguir una floración abundante, aunque si los veranos son muy calurosos lo mejor será situarlos en un lugar donde nos aseguremos de que reciban algo de sombra. Se adapta prácticamente a cualquier tipo de suelo, siempre y cuando no sean excesivamente ácidos. Agradece suelos fértiles y con un ligero grado de humedad durante todo el año. Un aporte de abono en primavera siempre será bienvenido y recompensado con una exuberante floración.

En cuanto a su mantenimiento, se recomienda podar las ramas que hayan florecido por la mitad para conservar su aspecto compacto y estimular la próxima floración. En invierno sólo se realizarán podas de limpieza, para eliminar partes muertas o dañadas. Nunca a fondo en esta época, pues la planta forma sus ramilletes de flores a partir de las yemas preexistentes del año anterior, por lo que si las podamos no tendremos flores en primavera.

Ten en cuenta que tardarán algún tiempo en cubrir y rellenar los huecos, por lo que es posible que necesites una pantalla provisional hasta que tus lilas estén completamente desarrolladas.

Hasta aquí llegamos con la selección de nuestros jardineros para añadir privacidad a nuestros jardines de forma natural.

La planta que finalmente elijas para cada zona de tu jardín dependerá del grado de ocultación que quieras conseguir. Una hilera de plantas semitransparentes puede funcionar en algunos espacios para romper un límite duro como un muro de hormigón, pero una ocultación completa puede ser preferible si buscas cubrir zonas poco atractivas en el jardín, por ejemplo un tendedero o cualquier pared o estructura artificial.

Esperamos que nuestros consejos como especialistas en proyectos de diseño y cuidado de jardines te ayuden a encontrar la mejor solución para tu espacio exterior.

Somos tus jardineros profesionales de confianza en Madrid. Muchas gracias por vuestros comentarios y preguntas.

Recuerda que si tienes dudas sobre cómo afrontar los desafíos en tu jardín, o deseas que hagamos un rediseño con un proyecto de paisajismo y jardinería adaptado a tus necesidades, solo tienes que llamarnos.

Jardinea es una empresa de jardinería, especializada en Paisajismo y Jardinería ubicada en Madrid. Atendemos clientes particulares y empresas en la Moraleja de Madrid, Alcobendas, San Sebastián  de los Reyes, Boadilla, Majadahonda, Pozuelo  y localidades cercanas.