Los cuidados del desconocido brezo en los jardines

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El brezo es una planta poco conocida en fresco, pero en cambio te sonará mucho de haberla visto en seco, trenzada, para conseguir ocultaciones en los jardines con objetivos de privacidad o separar zonas en el jardín.

El brezo es una planta perenne tupida que a menudo se olvida cuando se hace un proyecto de diseño de jardines, pero que está entre nuestras favoritas por su belleza única y sobre todo por su resistencia.

Es fácil de cultivar, se adapta a muchos estilos de jardín y está disponible en muchos colores, como rosa, morado, blanco, y rojo. Además, las espigas acampanadas y con muchas flores atraen a montones de abejas y constituyen una importante fuente temprana de alimento para ellas.

Lo mejor de todo es que hay variedades que florecen en todas las estaciones, incluido el invierno.

El brezo crece igualmente bien en parterres o macetas por lo que nos hace una función muy versátil en nuestros diseños de jardinería, a la vez que permite un cultivo de plantas pequeñas en el interior en invierno, pero poder sacarlas ya cuando son fuertes durante la primavera o el verano.

Tiene hojas perennes en forma de aguja de color verde o gris, pero también pueden volverse amarillas, naranjas o con un tono bronceado en distintas épocas del año, dependiendo de la variedad.

Suelen ser plantas de bajo crecimiento, llegando a medir entre los 30 y 60 cm de alto y de ancho, y resultan muy útiles cuando se plantan agrupados en masa, o a lo largo de los bordes.

No les molestan los suelos pobres, y toleran bien la salinidad. No es nuestro caso en Madrid, debido que la humedad del aire no tiene sal, pero queremos hacerlo constar, por lo que si algún madrileño lo desea, también pueden plantarse en zonas costeras en segundas residencias.

Sin embargo, el brezo no tolera los suelos arcillosos, así que plántalo en un arriate elevado o en macetas si tienes este tipo de suelo. Todas prosperan en suelos ácidos, aunque algunas toleran mejor los suelos neutros o alcalinos.

¿Cómo se cuida el brezo?

El brezo necesita unas 6 horas de pleno sol, y prefiere la sombra de la tarde en las zonas más cálidas. Como ya hemos dicho, crecen mejor en suelos ácidos con buen drenaje, así que si ya tienes coníferas, azaleas y hortensias, es probable que el brezo también lo haga.

Al plantar, cava un hoyo de dos a tres veces el tamaño de la maceta y coloca la planta a la misma profundidad que tenía en la maceta anterior. Riégala bien durante las primeras semanas para mantenerla húmeda, no empapada.

Recuerda que el breso es tolerante a la sequía, pero una vez establecidas las plantas en su destino.

No es imprescindible el abonado porque no le importan los suelos pobres. Para favorecer la frondosidad, pela ligeramente en primavera, antes de que broten, o en invierno, cuando las flores se hayan marchitado.

Haremos un contenido hablando de los tipos de Brezo y donde cultivarlos mejor. Estate atent@ a nuestras publicaciones…

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